Decía un profesor mío de economía, que en España no hay empresarios sino tratantes. Que éstos se diferencian en que los primeros quieren vivir de sus empresas y los segundos quieren ganar mucho dinero lo más rápidamente posible. Cada día que pasa veo cuan razón llevaba el hombre.
Ayer salía el presidente de los tratantes madrileños a la palestra. Si, ese que tiene nombre de actor y que respira extremadrecha por todos sus poros. Bien dice este tratante (de ganado) que para acabar con el paro, lo mejor es hacer contratos en los que la indemnización por despido pase de los 45 días a los 20. Y, este tratante (de personas), basa sus predicciones en que hasta ahora la mayor destrucción de empleo se ha producido en los contratos de fin de obra. Ya sabemos todos como se hacen esos contratos. Y yo me pregunto, si la máxima destrucción del empleo se ha producido en ese tipo de contratos, ¿no será que los tratantes (serpientes) aprovechan la coyuntura para deshacerse de los trabajadores? Porque, si una empresa está en quiebra, da igual cual sea el tipo de contrato que tienen los trabajadores, se van todos a la p. calle y se acabo. Pero si alguien quiere aprovechar que el Arlanzón pasa por Burgos para deshacerse de los trabajadores que exigen sus derechos, pues claro es mejor no pagarles indemnización por despido. Y es que si se trata de crear puestos de trabajo, hablen ustedes de eso y no de crear parados en sus mejores condiciones.
Lo peor de todo esto, es que esta propuesta ya está ahí, se quedará como dicen los ingleses en "stand by", pero tarde o temprano acabará aceptándose. Y ya son muchos los derechos perdidos. En 15 años, los trabajadores han perdido lo que les costó conseguir 100. Y luego seguirán las 65 horas, los 20 días de vacaciones en lugar de los 30, los salarios 600 euristas y como sigamos así, acabaremos trabajando por la comida.
Salud, lucha, lucha, lucha.
