jueves, 30 de septiembre de 2010

Después del 29-S

El día después de cualquier acto dónde intervenga la política, suele ser el día de los ganadores. Después de unas elecciones todo el mundo ha ganado. Después de una manifestación, se acumulan las diferentes varas de medir los asistentes dependiendo de si al medio en cuestión, le hace más o menos gracia que asistieran muchas o pocas personas.

Hoy es el día después al 29-S. Los sindicatos convocantes, dicen que fuimos mayoritarios los que secundamos la huelga. El Gobierno, como casi siempre desde hace un año, ni sabe, ni contesta, ni todo lo contrario y la perrera mediática intenta hacer ver a sus hooligans que sólo hubo huelga dónde la violencia (de los piquetes, por supuesto) se impuso. Y los de la extrema perrera dicen que, todo estaba pactado entre Gobierno y Sindicatos para que la huelga no fuera ni un éxito rotundo, ni un fracaso (como si se pudiera pactar que diez millones u ocho o seis acudan a la huelga y el resto no).

Parece claro que la huelga fue rotunda en el sector de la industria automovilística, en la construcción, en la minería y en el sector industrial y que fue escasa, sobre todo en la función pública. Parece que a los funcionarios no nos importa el 5% de rebaja de sueldo, ni que se esté hablando de acabar jubilándonos 7 años más tarde, ni por supuesto la solidaridad con los que no tienen empleo o los que pueden ser despedidos por una simple gripe. Otro sector que no secundó la huelga fue el de los conductores de metro de Madrid. Y entiendo que estén dolidos con toda la miseria y la mierda que se les echó encima, cuando su huelga, pero eso no significa que hayan traicionado la confianza de los que defendimos (y defendemos) a capa y espada su actuación de entonces.

Otra de las cosas que parecen también claras es que el gobierno no va a dar marcha atrás, en lo esencial. Tal vez estén dispuestos a reconsiderar lo de los fondos capitalización y poco más.Y aquí es dónde debemos dar la respuesta... en las urnas. Quedan poco más de un año para las Elecciones Generales. Y, lo que el P$%€ y este presidente veleta nos han quitado, no se arregla votando al partido carroñero de correas y adjudicaciones a los amigos. Lo que los fascistas liberales nos han quitado a través de éstos correveidiles zascandiles, se arregla o no yendo a votar o votando clara y masivamente a proyectos sociales de verdad, votando a partidos que de verdad sean de izquierdas.