Lo que empezó siendo una película de Leslie Nielsen con espías patanes, cotillas y casposos, se está convirtiendo en Pesadilla en Elm Street.Las primeras filtraciones de Wikileaks parecían una mala película de espías. Embajadores que manuscriben notas personales sobre presidentes y dirigentes políticos, sobre sus personalidades, gustos o defectos. Nada que no se supiera ya o que no haya sido escrito antes por algún periodista ético (que aún quedan algunos). Pero ayer mañana nos desayunamos con filtraciones que ya no tienen ninguna gracia y que, al menos a mí, aparte de miedo me producen bastante mala leche. Me refiero a las presiones que los Astados Unidos tuvieron sobre jueces, fiscales y magistrados sobre asuntos en los que el Sherif del mundo mundial, estaba implicado de alguna manera. De ahí el primer sobreseimiento del caso Couso o las paupérrimas investigaciones sobre los vuelos de la CIA y la cárcel de Guantánamo.
Lo peor de todo es que en los Astados Unidos, no se discute que las filtraciones sean una patraña, sino sobre quién y cómo le han suministrado a Wikileaks toda esa información y si éstos pueden legalmente colgarla de la red. Se habla de declarar a Wikileaks y a su fundador Julian Assange terroristas internacionales. De hecho, según el diario de las PRISAS (medio elegido en España para transmitir todas las filtraciones) ya se ha emitido una orden internacional de detención desde Suecia contra Julian en la que le acusan de violación.
Muchos se preguntan por qué ahora hay que sacar toda esa masa de pus sobre el Gobierno de España y que hay detrás de todo eso. No soy amigo de teorías conspirativas (al menos sobre esto) y yo pregunto ¿por qué no? Entendería los recelos si la información filtrada sólo afectase al Gobierno e instituciones de España. Pero hay para todos. Desde Israel y sus apoyos a golpes de estado y asesinatos selectivos en países vecinos, hasta el hartazgo de Benjín con el atronado dictador de Corea del Norte y su apuesta por una Corea unida con un sistema capitalcomunista.
Lo que demuestra toda esta información filtrada es que el Gobierno de España, es un pelele. Se ha pasado de aquellos tiempos en los que Zapatero se enfrentó al borracho Bush sacando las tropas de Irak, una vez ganadas las elecciones, a intentar congraciarse con el país norteamericano a toda costa. Lo del Fiscal General del estado es no de cese sino de detención inmediata por traición y prevaricación. Y todos sabemos quién pone y quién dirige las políticas acusatorias o de sobreseimiento de la Fiscalía General del estado. Como siempre, la cantamañanas de la Ministra de exteriores ya ha dicho que todo es mentira, mientras que el fiscal general no sabe, no contesta, pero no desmiente las informaciones.
Lo que demuestra también estas informaciones colgadas en Wikileaks es que todos estamos tutelados por el gran Sheriff mundial y que si hay algo que les molesta, intentan por todos los medios cambiarlo. Y si para ello tienen que dar golpes de estado, asesinar o comprar voluntades no hay reparo alguno en hacerlo. Todo esto ya los suponíamos, pero es duro que los que se consideran demócratas y quieren dar ejemplo al mundo, sean una vulgar banda mafiosa. Que quieran cerrar Wikileaks a base de declarar terrorista a su fundador, dice mucho de la laxa doble moral americana (propia del Partido Patrincar español). Y que ellos que se dedican a matar y a ordenar matar para salvaguardar supuestos intereses propios en países extranjeros llamen terrorista a un ciudadano por filtrar información confidencial, también dice mucho de lo que es el terrorismo actual y los llamados antisistemas.
Por último, dejar constancia que, si ZP y su gobierno son capaces de adular al matón mundial a fin de ser invitado y amigo en instituciones internacionales, no me extraña que todas las medidas tomadas “por nuestro bien” en nuestra contra y a favor de los Davos, Soros y demás trileros, sean también a sabiendas de que no servirán para nada, salvo para ganarse a éstos como amigos y que por tanto, España acabe siendo intervenida si o si. Anteayer, la Menestra de Hacienda ya decía que la Merkel se podía estar calladita. Ayer reconoció en público que las medidas de Irlanda no han servido para nada y que después vendrán Portugal, España, Italia y ahora ya añaden Bélgica. A la Merkel le interesa la intervención de España para poder salvaguardar sus propios bancos. A los trileros les interesa también. para seguir especulando y ganando dinero. La actitud de ZP de niño bobo que quiere caer bien a todos a toda costa, nos va a llevar a tener que pagar la factura de los trileros. Y lo peor de todo es que el registrador presidente del Partido Patrincar es aún peor y no sólo nos hará pagar la factura sino que se quedará con la propina.
