Leo en el diario gratuito QUE!, que en los presupuestos del 2009 hay una partida de siete coma dos millones de euros (7.200.000,00 €) para viajes de los diputados. Eso se llama austeridad. Mientras a los funcionarios corrientes se les aprieta el cinturón hasta asfixiarlos, éstos funcionarios interinos se gastan 20.571,43 € por cabeza (sueldo y medio anual de un funcionario corriente) sólo en viajes, tienen pensión vitalicia por cuatro años de trabajo y una serie de prebendas que para mi las quisiera yo.
Hace tres días se conocía que, mientras al Juez que no encarceló al presunto asesino de Mariluz, se le multaba con 1.500 euros (1/3 de su sueldo mensual) a la secretaria del Juzgado que es una funcionaria corriente se le amputaba su jornal durante dos años (1.500 euros frente a 36.000). Si yo fuera el bedel del juzgado estaría temblando ya que, a lo peor lo dejan sin empleo y sueldo durante 10 años.
Y es que en este país hay cosas que después de más de treinta años de la desaparición de Paco el Pantanos siguen sin cambiar. Los jueces siguen siendo la élite a la que no se puede tocar, el gobierno hace de su capa un sayo y los curritos son el carro de todas las hostias.
Salud, educación, mejoras salariales, subidas de impuestos directos progresivas, menos impuestos indirectos, más lectura, menos catecismo y menos TV.
Bitácora de un eterno aprendiz
