Veo esta foto de Público en su edición de hoy, tres de junio, y quedo anonadado. El que está abrazado al Generalísimo carnicero de Ferrol es un tal Millán Astráin, Jefe de propaganda del Régimen y a quién Don Miguel de Unamuno llamó inválido (no sabemos si por la herida de guerra o por la cara de tarao que tenía este anormal).
Lo que me ha llamado poderosamente la atención son las tres figuras centrales. El primero por la izquierda que creo que es Mola, ególatra ideario del golpe de estado del 36. Me llama mucho la atención su cara de resabiado estudiante. Sus ojos entreabiertos y su mirada al suelo dice mucho de una persona y le definen como de "poco fiar".
Del carnicero de Ferrol no me llama nada la atención. Sus cuarenta años de impunes asesinatos, de paseos bajo palio y de cárceles políticas lo dicen todo de él.
El que más me llama la atención es el de la derecha. El animal llamado Millán Astray (que por cierto eran los apellidos de su padre. El que el cogiera ambos y los uniera dice mucho de este personaje chulo, dantesco y con complejo de Edipo). Bien pues mirando esta foto puedo decir sin posibilidad de equivocarme que este era un tipo sádico, soez, sucio y rastrero. Sus negros dientes le definen como un tipo asqueroso y sin escrúpulos. Su mirada al cielo pero con los ojos cerrados aseguran que a este individuo no le temblaba la mano a la hora de asesinar por sus ideas.
La verdad que esta foto da miedo. Millán tiene cara de hijoputa y Mola de persona de poco fiar.
Franco tiene cara de no haber roto nunca un plato. Y esos son los peores. Este no rompió nunca un plato pero estuvo en el gobierno 40 años y para ello tuvieron que morir misteriosamente los dos "inventores" del golpe del 36: Mola y Sanjurjo.
De las buenas gentes me libre dios,...
