domingo, 13 de septiembre de 2009

Del talante al Felipismo.

Parece que nuevamente Zapatero se desvía día a día hacia la derecha convirtiéndose en Felipe Zapatero en lugar de José Luis Rodríguez, el del talante, el que salvó al PSOE de una muerte segura cuando, tras 12 años de de gobiernos llenos de escándalos de corrupción, de políticas neoliberales y de trajes de pana en la cara y lujosas mansiones en la cruz, acudimos en masa a votar a este nuevo líder que resurgía de las cenizas de la izquierda.

Cuatro primeros años llenos de una oposición irresponsable que nunca asumió la pérdida de las elecciones porque ellos no están para presentarse a elecciones sino para ganar el poder (véase lo mal que les ha sentado la pérdida de la alcaldía de Benidorm), parece que minaron las ideas de José Luis que, renqueante, volvió a ganar nuevamente las elecciones. Pero de esta victoria parece que Zapatero sacó una lectura favorable al felipismo y contraria a políticas del pueblo que le llevó a ganar dos elecciones generales.

Así ante la situación general creada por los libertarios del capital, por los que especulan con la vida de los pobres, con el sudor de los trabajadores, Zapatero está dispuesto a disfrazar su política de izquierdista con medidas como la cobertura a los parados de larga duración pero que en realidad se trata de lo de siempre: los que crearon el crac siguen nadando en la abundancia, y los que, cuando había vacas gordas debíamos apretarnos el cinturón para que ellos siguieran malgastando nuestro dinero , ahora que las cosas están peor , paguemos la salida a su nueva situación de holgura.

Porque los impuestos indirectos no son soliales, señor Felipe Zapatero, los impuestos indirectos los pagamos todos por igual y eso señor Felipe Zapatero no es de izquierdas sino de una derecha a la que usted se acerca peligrosamente. A la desaparición del impuesto de trasmisiones, se suma ahora su intención de subir el IVA (que pagamos únicamente los trabajadores ya que autónomos y empresarios se lo acaban siempre deduciendo), de subir los impuestos de sobre carburantes y los que gravan el alcohol y el tabaco.

Al contrario de lo que dicen los que dictan su política económica, la subida del IVA acabará en una subida de precios, en menos dinero para que la gente gaste y por lo tanto en una recuperación económica más lenta, menos consumo, más paro y con su mandato.

Si la Ministra de Economía fuera medianamente original y no se dedicara a lo que ha hecho toda su vida, (copiar a los demás), debería usted bajar el IVA, incrementar los impuestos de sociedades para ganancias mayores de dos millones de euros/año, gravar la tenencia de capital, impedir que las fundaciones sean la vía de defraudar impuestos y sobre todo ver porqué toda esa gente que declara ganancias de 6.000,00 euros años posee uno o varios mercedes, audis o BMW y viven en chalets adosados o en grandes casas. Eso sería una política original que crearía empleo y llenaría las arcas del estado. Lo otro, señor mío, es más de lo de siempre y ya sabe usted los resultados: más riqueza para los ricos y más pobreza para los que pagan su sueldo con impuestos porque no podemos defraudar aunque queramos.