jueves, 8 de julio de 2010

Pim, pam, pum, Ministro al caer.

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Ayer comentaba en el Blog de Nacho Escolar Arnau-el Catalán al post de Don Nacho sobre la corrupción en el Partido Trincofascista, algo así como “¡Hostias! Vamos a ver qué ministro socialista será el primer en caer”. Y no se equivocaba. Cada vez que a los trincosos les montan una operación policial (como las que montan contra la mafia) ellos salen a la palestra a disparar contra a algún Ministro. En este caso, contra Rubalcaba al que le tienen bastantes ganas a consecuencia de que les ha quitado el chollo ETA y de que les está jodiendo la fiesta del “pringue” entre los dedos. Y van cuatro ya (Palma-Arena, Diputación de Castellón, Gurtel y ahora las Basuras de Alicante).
La jeta de esta “familia” es asombrosa. En todos y cada uno de los registros policiales han salido a la palestra a defenestrar a alguno de los Ministros del P$%E. No salen a desmentir que los suyos se dediquen al trinque como principal objetivo. No. Salen a la caza de algún Ministro. Con ello consiguen dos objetivos: primero que se deje de hablar de sus corruptos para centrar la atención en el Ministro defenestrado y segundo crear la sensación en la opinión pública de que los corruptos son los Ministros y no quién se lleva la pasta en bolsas de Basura.
Ayer tarde, el juez instructor ya dejó claro que toda la operación fue montada por la policía con su conocimiento y que está al tanto de todo. Da igual que la policía siga el procedimiento habitual en el caso de bandas mafiosas. Da igual que el juez diga que está al corriente de la operación (aunque desde el CGPJ se sigan sembrando dudas). Da igual todo. Aquí lo importante es hacer bulla hasta obtener la cabeza de Rubalcaba, el Ministro que más daño le ha hecho a la “familia” trincofascista.

Por cierto, que ya que estamos hablando de corruptelas es imprescindible que la fiscalía anticorrupción siga el procedimiento abierto contra el Pocero en Seseña. No es de recibo que el Alcalde que no le permitió hacer y deshacer, el que no se quiso vender por un puñado de euros, el que no quiso que sus vecinos sufrieran penurias de abastecimiento de agua a consecuencia del ansia encementadora del Pocero, siga investigado por la fiscalía anticorrupción mientras el causante de grandes desmanes urbanísticos sigue libre y sobre todo sin que nadie explique sus relaciones con el Presidente del Congreso, católico, apostólico y consuegro de Rafael.


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