Los dictadores, tienden a colmar el pensamiento de TODOS los demás. Se erigen en representantes únicos de su pueblo y hacen único su tendencia e ideario. Además, como saben que no existe la gracia de dios y que su puesto está ocupado por la fuerza, hacen que las posibles ofensas a su persona, sean ofensa al resto del estado.Así, hay similitudes más que preocupantes en ciertos políticos que tienden a erigirse como cabezas únicas, como un único sentimiento. Quién osa criticar al elegido está criticando a todo el pueblo, no es persona de bien o no es de fiar. Rajoy es uno de esos personajes de la política actual que con frecuencia se autonombra portavoz de todos los españoles. Quién no está con él no es español de bien, ni persona de fiar.
Pero más escandaloso es el caso de la Rancia. En el poder tras la espantada de Tamayo y Sáez (con vigilantes, hoteles y viajes pagados por empresarios cercanos a la extrema deecha), con un gobierno lleno de escándalos como el de las escuchas, el gúrtel, canal, etc. , tiende a confundir Madrid con su gobierno y al pueblo de Madrid con su persona.
Ayer, Rodriguez Ibarra (político por el que no tengo ninguna simpatía) criticó, con más razón que un infalible al desgobierno de la Rancia, quién enseguida salió a la palestra para comunicarnos que Ibarra insulta sistemáticamente al pueblo de Madrid.
Y es que estos fascistas, no dan puntada sin hilo. Y como llevan ocho años diciendo que Zapatero asfixia Madrid, y como hay miles de estúpidos que se lo creen y dos millones de TDLC que lo aceptan, pues siguen insistiendo en ello.
Y hay que decirla a la Rancia que no, que ella no es Madrid. Y que fascista, soez, estúpida, mala persona e insoportable sólo es ella y alguno de sus colaboradores. En el resto de Madrid, hay de todo como en botica.
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