viernes, 31 de diciembre de 2010

Mi más sincero pésame para 2011

Un día como hoy (Nochevieja) toca hacer repaso. En este caso del año que se acaba y de la primera década del siglo XXI. Como todos sabéis en estos primeros diez años, se ha acabado con la indemnización por despido, el salario mínimo interprofesional ha aumentado pero el real ha bajado a niveles de la década de los ochenta. Tenemos cuatro millones de parados y, en general somos más pobres. Se han acabado las movilizaciones. A la gente no le gusta salir a la calle salvo a beber litronas y cubatas en vasos de cachi. Los funcionarios son un 5% más pobres y aunque no se lo crean los demás también (incluso más). El gobierno de un partido que lleva el nombre de socialista, ha sido engullido por los nuevos neocoms que ahora se llaman mercados pero que son los mismos hideputas de siempre con los mismos collares. El Ministro de Industria sigue siendo tan inepto como siempre y tan estúpido y poco considerado como para comparar la subida de la luz con el precio de un café.

Y ahora la parte positiva aunque a la mayor parte de nosotros no nos toque nada: Telefónica ganó 8.835 millones de euros de beneficios en los tres primeros trimestres del nefasto 2010, el Banco de Santander 6.080 millones de euros, el BBVA: 3.668 millones, la pobre Iberdrola 2.069 millones, la de la gasofa Repsol 1.786 millones, y el español modelo que tiene sus fábricas en Marruecos (Inditex) 1.179 millones. Según dice Escolar, al final de año serán unos 50.000 millones (casi el doble del déficit del estado).

Eso sí, el déficit lo pagamos nosotros y éstos se lo llevan a Las Caimán, Liechtenstein o cualquier otro paraíso fiscal con los que nuestros políticos prometieron acabar al principio de esta nueva guerra mundial del dinero que nos está llevando a una nueva edad media.
Por algo los mayas pronosticaron un nuevo orden mundial para 2012. ¡Y nosotros que pensábamos que sería para nuestro bien! Efectivamente es el fin del mundo actual.

No sé si desearos Feliz año nuevo o daros el pésame.