Los del trinque, tienen la mala costumbre de hacerse portavoces de quiénes no queremos que sean nada nuestro. Podrían haber dicho que hay muchos, pocos, algunos, una gran mayoría, unos cuantos, etc. Cualquier cosa habría valido. Pero no. Mariano “El babas” se erige nuevamente como salvapatrias.
Si el pueblo español fuera medianamente inteligente, pediría explicaciones a esta gentuza por sus constantes mentiras, por su constate irascibilidad que provocan en algunos de nosotros con sus habituales y chabacanas formas de actuar. No hace ni un mes que los del Trinque, rechazaron en la mesa de ambas cámaras una propuesta de la también populista y demagógica Rosa Diez, para acabar con los privilegios de los diputados en el tema de las pensiones. Pero como vengo advirtiendo, los del trinque no tienen discurso. Los del trinque hacen suyo, cualquier discurso que escuchen y cuyo run, run, sea suficientemente conocido. Ellos saben a través de encuestas que piensa el pueblo llano. Y hacen suyo ese discurso. Esto, no sería malo si luego lo llevaran a cabo. Pero sólo son soflamas para atraer hacia sí el voto de la gente. Y tienen tantas ganas de llegar al poder, tantas ganas de que haya elecciones anticipadas, que a lo mejor, se llevan un nuevo disgusto en las urnas. Porque, cuanto más les oigo, más ganas me dan de votar de nuevo al sinsal del talante.
Por otra parte, cada vez que oigo al tonto de los cojones y también populista Ministro de Fomento, me arrepiento del pensamiento de volver a votar al sin sal del talante. A éste que se ha vendido a los intereses de los Soros, Botines y clubes Bidelberg y que nos ha quitado en dos años todos y cada uno de los derechos conquistados a lo largo del siglo XX.
Si yo fuera Zapatero, le pondría un bozal bien fuerte a personajes como Blanco, Sebastián o Doña Leire. Porque cada vez que abren la boca, acercan más al gobierno a Mariano “El Babas” y todos los descendientes de Alí Babá.
